Habitantes de un sector de barrio Santa Clara unidos en una red de alerta ante los innumerables robos sufridos pidieron a la Comisaría Tercera extremar cuidados. Sufren a diario los embates de la delincuencia. En el último suceso denunciado un conocido delincuente quedó filmado cuando tras salir de la dependencia donde estaba detenido, saltó un tapial para ingresar a una casa y terminó robando en otra.
De la redacción de EL NORTE
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Residentes de un sector de barrio Santa Clara delimitado entre avenida Illia y Francia, y que abarca alrededor de cuatro manzanas, viven en los últimos tiempos una situación inusitada. Si bien el fenómeno de la inseguridad se reproduce a lo largo del país, ellos consideran que en los últimos meses padecen un incremento en la cantidad y en la audacia del accionar delictivo.
Los vecinos se unieron, colocaron cámaras en sus casas y a través de un grupo de whatsapp difunden la alerta ante comportamientos extraños. Montan guardia durante la noche para evitar los robos. En las grabaciones ven secuencias que se repiten. Los sujetos primero merodean y luego eligen las viviendas donde robar casi sin disimulos. Los habitantes de la zona álgida señalan que se trata casi siempre de los mismos, que quedan registrados en las cámaras transportando los elementos robados y que lo hacen generalmente hasta un asentamiento precario ubicado en el predio de la ex Fumacol.
En el último de los hechos que los vecinos lograron reconstruir a través de las diferentes cámaras de seguridad puede verse a uno de los delincuentes salir caminando de la dependencia policial tras ser liberado luego de estar detenido, a los pocos metros cometer un intento de robo en una casa y un robo consumado en otra.
En dialogo con EL NORTE una de las vecinas relató: “Nos roban constantemente, ya no podemos salir en ningún horario, antes no nos pasaba esto. Hay todo tipo de robos, se meten en las casas, te atacan cuando salís a hacer compras. Todo les sirve. Hace unos días durante la madrugada le entraron en la vivienda y le robaron a un hombre mayor. Lo asistió una vecina, quedó en shock estaba como perdido. Se trata casi siempre de las mismas personas, aunque últimamente se sumaron caras nuevas. Hay un movimiento raro en el predio de la ex Fumacol, lo usan de aguantadero e ingresan las cosas robadas ahí. Ese lugar necesita control. Nos sentimos desprotegidos. Ahora tratamos de protegernos entre nosotros”.
Mas testimonios
Por su parte, otro vecino que sufrió tres robos en poco tiempo explicó: “Nos manejamos con el grupo de vecinos, todos tenemos cámaras y nos vamos avisando, nos ponemos en alerta y en muchos casos llegamos a abortar los robos, pero no podemos seguir así. La mayoría de nosotros trabaja temprano y no logramos descansar lo suficiente. Montamos guardia hasta las 4 ó 5 de la mañana para vigilar. Ellos empiezan a merodear el barrio alrededor de las 11 de la noche, eligen los lugares donde robar y alrededor de las 3 atacan”, manifestó el hombre residente del barrio.
Respecto de los hechos de los que fue víctima narró: “Sufrí el primer robo del año en febrero. Forzaron la puerta de mi casa y se llevaron todo lo que pudieron. Hace diez días atrás volvieron violentaron la abertura de ingreso, abrieron el auto que estaba adentro. Me dedico a la construcción en seco y se llevaron todo mi equipo de trabajo. Después recuperé parte de las herramientas por mi cuenta, pero no debería ser así. El lunes pasado fue el tercero. Un personaje conocido en la zona por sus andanzas me volvió a robar. Estuvo seis días detenido en la Comisaría Tercera por otro hecho, salió alrededor de las 9 de la mañana caminó unos metros, saltó el tapial de un terreno para ingresar a una propiedad, pero no pudo robar porque los perros no lo dejaron. Caminó dos cuadras más entró a mi casa y se llevó la moto de mi ayudante que él usaba para venir desde Sánchez a trabajar. Toda la secuencia quedó registrada en las cámaras. Se pudo recuperar el rodado pero ya estaba desarmado, lo habían destrozado. El ladrón es un sujeto muy conocido, con antecedentes. Tiempo atrás protagonizó un incidente en el que recibió una gravísima herida dentro de la Comisaría Primera. Entra y sale permanentemente”, aseguró otro vecino.
Reclamos
Respecto al pedido por mayor seguridad y los reclamos ante la Comisaría Tercera, los residentes del barrio, sostuvieron: “El martes fuimos a la dependencia y les presentamos nuestra queja. Nos escucharon, pero también nos explicaron que ellos tienen un límite dentro del cual pueden actuar. Nos prometieron reforzar la seguridad. Después vimos más presencia policial, hicieron rondas, pero es necesario que eso se mantenga, que no sea solo para tranquilizarnos ahora. Necesitamos más seguridad. Estamos cansados de hacer el trabajo de vigilancia, de correr riesgos tratando de recuperar lo robado. Hace poco un vecino se hartó y le pegó a un delincuente que le había robado, lo pusieron preso a él y le dictaron una perimetral, pero paradójicamente el ladrón no fue apresado. Queremos más presencia policial, más compromiso social, que la gente no compre lo robado y que la justicia no libere a los delincuentes con tanta facilidad. Nos ofrecemos a colaborar y hasta a pintar los calabozos. Somos gente trabajadora, de familia. Solo queremos vivir tranquilos”, concluyeron.