Sobre ambos productos, los de mayor demanda durante la celebración cristiana, se aplicó días atrás un incremento del 50%. El año pasado se vendían a $7000 el kilo, que ahora cuesta $11.500. El pollo de mar, en cambio, tuvo un 28% de incremento en relación con 2024. ¿A cuánto se vende el pescado de río?

De la redacción de EL NORTE
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El pescado es uno de los alimentos íconos de Semana Santa, por lo que algunos nicoleños ya han comenzado a averiguar precios o comprar para tener en el freezer. Este año se da una novedad particular y es que los precios tuvieron su correspondiente aumento con relación a marzo del año pasado, cuando se celebró esta fecha.
De acuerdo al relevamiento realizado por EL NORTE en pescaderías de San Nicolás, sobre el atún y la merluza se aplica un incremento interanual del 65%. En efecto, los dos productos de mayor demanda se vendían el año pasado a $7000 el kilo, y hoy cuestan $11.500.
También se aplica un incremento importante sobre el precio del langostino, que en 2024 costaba $19.000 el kilo y ahora se vende a $28.000. Mucho menor, en tanto, es el aumento aplicado sobre el kilo de salmón blanco, que en un año pasó de $30.000 a $37.000 (+ 23%).
Muchas personas optan por consumir pescado de río, en virtud de que se pueden conseguir piezas frescas en San Nicolás. En este caso, la suba interanual gira en torno al 22%. Es el caso de la boga, que en 2024 se vendía a $13.600 el kilo y ahora cuesta $16.000. También el surubí aumentó 22%: el kilo pasó de $11.500 a $14.000. Caso extraño es el del dorado, cuyo precio al público bajó 24%. En efecto, para Semana Santa de 2024 el kilo se vendía a $14.500 y hoy se vende a $11.000.
Tradición teológica
La elección del pescado como alimento en Semana Santa tiene un fuerte sustento teológico y simbólico dentro del cristianismo. Según el Código de Derecho Canónico -la norma que regula la vida de la Iglesia-, los viernes del año, salvo que coincidan con una solemnidad, deben ser días de abstinencia. En el caso del Viernes Santo, esta práctica cobra especial importancia porque recuerda el sacrificio de Jesús en la cruz. En ese contexto, los católicos están llamados a realizar un gesto de penitencia, renunciando a ciertos placeres, como el consumo de carne.
En la antigüedad, la carne roja estaba asociada a los banquetes y al lujo, mientras que el pescado se consideraba un alimento más humilde. Por eso, se optó por dejar de lado la carne como signo de recogimiento. Además, el pescado tiene un significado simbólico profundo en el cristianismo: aparece en los evangelios en el milagro de la multiplicación de los panes y los peces, y fue uno de los primeros símbolos que identificaron a los cristianos en tiempos de persecución.
